domingo, 1 de noviembre de 2009

Los vampiros en Roma




La mitología grecorromana presenta varios precursores de los vampiros modernos. En la Odisea de Homero se habla de muertos devueltos a la vida temporalmente.Los no muertos son demasiado insustanciales para ser escuchados por los vivos y deben beber sangre para aumentar su fuerza. En el relato de Homero, cuando Odiseo viaja al Hades, sacrifica un cordero para que las sombras pudieran beber su sangre y comunicarse.

En la mitología romana, las larvae o lemures eran espectros que regresaban de la muerte, pero no tienen ninguna relación con la sangre.

Los personajes mitológicos más relacionados con la figura del vampiro son siempre mujeres, aunque no fueron consideradas no muertas, como Empusa y Lamia, ambas relacionadas con la diosa ctónica del inframundo Hécate, y la estirge de la mitología romana. Con el tiempo los dos primeros términos generales se convirtieron en palabras para nombrar a las brujas y demonios, respectivamente.

Empusa Empusa era hija de la diosa ctónica Hécate y era descrita como una criatura demoníaca, con una pata de burro y otra de bronce.Se transformaba en una mujer joven y hermosa y mediante esta argucia conseguía seducir a los hombres antes de beber su sangre mientras dormían.



Lamia Lamia, por su parte, era hija del rey Belo y una amante secreta de Zeus. Cuando Hera, la esposa de Zeus descubre la infidelidad de éste, mató a todos los hijos de la relación. La mortal Lamia,transformada por el dolor en un híbrido entre mujer y serpiente, juró venganza y asesinó a varios niños pequeños mientras descansaban en sus camas por la noche, bebiendo su sangre.

Plutarco recoge la leyenda de que Lamia podía sacarse los ojos y volver a ponérselos. Otras tradiciones afirman que Hera la maldijo con no poder cerrar los ojos, de tal forma que nunca pudiera borrar la imagen de sus hijos muertos.

Estirge Al igual que Lamia, las estirges se alimentan de niños, pero también buscan hombres jóvenes como presa. Se les describe como criaturas con cuerpo de los cuervo o de aves en general, y más tarde fueron incorporados a la mitología romana como una especie de ave nocturna que se alimenta de carne humana y sangre.

La raza de vampiros rumanos llamada Strigoï no tiene relación directa con las estirges grecorromanas, pero su nombre, como el del Shtriga albanés y el eslavo Strzyga,[48] deriva de la mitología romana, a pesar de que los mitos acerca de estas criaturas son más similares a sus equivalentes eslavas que a las clásicas.

Mormo Mormo era un espíritu que mordía a los niños con mal comportamiento, compañero de Hécate. El nombre, posteriormente, se amplió para referise también a una mujer vampiro que asustaba a los niños.Esta referencia se encuentra principalmente en algunas de las obras de Aristófanes.






Así que los vampiros de hoy en dia son totalmente diferentes

3 comentarios:

melpómene dijo...

no hay monstruo mejor que el vampiro *.*

Rocío dijo...

Jajajaaa, Melpómene. Te oye Polidori y te hace un altar. Besos, guapa.

Interesante la entrada, Kratos. A ver si te llevo dos libros sobre cuentos griegos que tratan sobre ese tema. Te gustará.

Ariadna dijo...

Vaya cuentos chinos que nos venden ahora, entre las sirenas y los vampiros... jaja
Me gustan más los vampiros de ahora, estoy totalmente de acuerdo con Melpómene.
Besitos